NSN.- Aparentemente, según una investigación de un  organismo especializado, la policía de Chicago continua deteniendo personas sospechosas en base al color de su piel y termina por no hacerle cargos al detenido.

La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) informa que en el verano del 2014, los agentes del orden de esta ciudad, detuvieron a poco más de 250,000 personas, en su  gran mayoría negras (70 por ciento).               Según un tipo de tarjetas que llena cada policía en la cual ponen los datos de la detención de cada persona, en más de 250,000 de dichas tarjetas no figura la causa legal de la detención. En ellas ponen nombre dirección y teléfono y el tipo de contacto como tráfico vehicular, o por sospechas de pandilla, drogas etc. Pero en esa cantidad de tarjetas el oficial no puso la causa de la detención.

ACLU, informo que en base a sus investigaciones, la mayoría de los oficiales se ven presionados por sus supervisores a llenar la mayor cantidad de tarjetas posibles, por lo cual solo detienen a una persona para cumplir con una determinada cuota de tarjetas llamadas “Tarjetas de contacto”.

El reporte de ACLU, se produce en tiempos en que el Departamento de Policía de Chicago trata de borrar la  constante disparidad en los arrestos en una ciudad donde la población de afroamericanos es de un 38 por ciento. En la parte del noroeste de Chicago, donde los habitantes negros componen solo el 1 por ciento, los arrestos en su contra son de un 15 por ciento. Tales arrestos, sin aparente causa legal entre los hispanos, es de un 19 por ciento y el de blancos es de un 9 por ciento.

El superintendente de Policía de Chicago, Garry McCarthy, declaró en un comunicado sobre el resultado de la investigación de la ACLU, que “el construir la confianza con todos los residentes de la ciudad es fundamental en la filosofía de su departamento”.